El Museo del Pueblo Judío, situado en el campus de la Universidad de Tel Aviv (Israel), conocido hasta ahora por su nombre en hebreo Beit Hatfusot (Casa de la Diáspora), reabrió recientemente sus puertas después de un largo proceso de reprogramación y remodelación bajo el nombre de ANU (del hebreo, nosotros). Este renacer de la prestigiosa institución dio a luz una faceta nueva cuya principal diferencia con la anterior es su naturaleza multifacética. Un peculiar aspecto de esta nueva mirada polifónica, radica en la reubicación de la mujer en el camino transitado por la cultura judía, hecho que lo singulariza respecto a instituciones semejantes.