El itinerario transitado por la educación judía en Cuba desde principios de la inmigración hasta nuestros días está sustentado en dos principios fundamentales del judaísmo, la transmisión de valores y conocimientos de generación en generación («ledorvador») y la reparación del mundo («tikún olam»). Se resalta la gran diversidad del alumnado en la actualidad, en lo que atañe a nivel de escolaridad, profesiones y edades, así como de las áreas temáticas y estrategia didácticas. Especial atención se dedica a preservar la memoria histórica y a interrogantes relacionados con la identidad individual y colectiva de la comunidad judía en Cuba.